¿Quién puede ser miembro?
La asociación está formada por profesionales relacionados con la formación y la actividad financiera, y por los consumidores interesados en mejorar su educación financiera.
Los profesionales que deseen formar parte de esta asociación han de realizar el curso de educador financiero y superar el examen de certificación, y los consumidores que deseen ser miembros simplemente tienen que apuntarse a los programas de educación financiera y realizarlos.
¿Por qué hace falta educación finciera?
Nuestros abuelos y nuestros padres han trabajado de media desde los 23 hasta los 63 años. El trabajo se caracterizaba por ser estable y seguro por lo que las familias hacían planes hasta la jubilación. La esperanza de vida para esta generación es de 79 años, y con ellos el Estado del Bienestar está cumpliendo sus compromisos.
Hoy la situación laboral es muy distinta, y queremos llegar a la jubilación con un patrimonio financiero, porque la cobertura de la Seguridad Social cada vez se va reduciendo más, sobre todo en lo que a las pensiones se refiere. Colectivos como los autónomos o las mujeres buscan organizarse mejor para mantener el poder adquisitivo en momentos de dificultad o la independencia financiera en caso de crisis familiar.
En esta situación, las preguntas que se hacen los ciudadanos son sobre su futuro, su calidad de vida, su bienestar, y la educación financiera de calidad ofrece respuestas.
¿Qué se entiende por educación finaciera de calidad?
La OCDE dice que la sociedad para mejorar el bienestar social tiene que actuar sobre tres pilares: inclusión social, protección del consumidor, y educación financiera de calidad (National strategies for financial education OECD/INFE policy handbook).
La educación financiera de calidad es aquella que convierte al ciudadano en una persona capaz de ser consciente de sus necesidades, capaz de permitirle saber elegir con quién aconsejarse y capaz de permitirle evaluar el servicio recibido.
La educación financiera es una estrategia de política social no es sólamente «un curso»: es un proceso para mejorar la inclusión social y en general la calidad de vida de los ciudadanos.
La educación financiera no debe ser una simple página web donde publicar contenidos o un curso de alfabetización o selección de productos, sino que debe ser un servicio que genere mejora en la calidad de vida del ciudadano, que genere cambio de hábitos. Debe ser útil para convertir consciencia en acciones concretas. Y por último, y no menos importante, ha de ser con garantías, y éstas se encuentran en las normas técnicas de calidad, como las normas UNE o ISO, que cualifican el método y a los profesionales que la imparten.
¿Qué modelo de educación financiera promueve la AEPF?
Nuestro programa de educación financiera se desarrolla en 5 pasos:
Primero: sesiones presenciales en empresas, ayuntamientos, asociaciones, etc y página web de educación financiera que enlace estas instituciones con la web de AEPF.
Segundo: acceso de los ciudadanos a la plataforma a través de la web.
Tercero: encuentro personal del ciudadano con un educador financiero certificado por la AEPF.
Cuarto: entrega al ciudadano de su planificación financiera personalizada.
Quinto: evaluación del servicio y seguimiento.
El objetivo es prestar desde la asociación un servicio de educación financiera de calidad que genere hábitos en los ciudadanos que mejore su calidad de vida y bienestar personal y familiar a largo plazo
¿Cuál es la clave del éxito de este programa?
No es un simple curso de formación, es un servicio profesional. Los Educadores Financieros de la asociación acompañan al ciudadano a resolver concretamente los problemas de su vida, empezando por el presupuesto familiar, siguiendo por la administración de las deudas, los seguros, la jubilación, y los objetivos de vida conseguidos con el ahorro y la inversión. Es un programa de política social, con mediciones y garantías.
La educación financiera debe contar con garantías para el ciudadano, y éstas emanan de Normas Técnicas de Calidad (La certificación del método, la evaluación del consumidor y la segunda opinión).
¿A quién va dirigido?
Nuestro principal destinatario es la empresa. Ofrecemos dos niveles de acercamiento de la educación financiera a los empleados y directivos. El nivel básico, también llamado “Yo-Welfare on-line”, que consiste en un recorrido de autoformación on-line personalizado para cada empresa, con la ayuda de un educador financiero. El nivel divulgativo o “Yo-Welfare presencial”, consiste en realizar en la propia empresa el programa formativo y el acompañamiento personalizado hasta la realización del plan financiero personal de los interesados.
Este mismo modelo se puede realizar en cualquier otra organización, basta que se pongan en contacto con nosotros y vemos la forma de realizarlo.
Respecto al ciudadano en particular, es a través de la web o de nuestro número de atención que pueden solicitar un encuentro con uno de nuestros Educadores Financieros.
¿A quién puede interesar hacerse educador financiero?
Es un área que pueden incorporar las propias empresas, un experto interno que ayude a los trabajadores en la parte de sus finanzas personales. Las gestorías, asesorías o consultorías en la parte de las finanzas personales de sus clientes. Los profesionales de la venta de seguros y productos financieros para ofrecer un servicio orientado a la planificación financiera. Y por último como profesión especializada para titulados relacionados con las ciencias sociales (sociólogos, educadores, psicólogos, economistas, abogacía, etc.).
¿Qué otros servicios y actividades ofrece la Asociación?
Dirigido a los profesionales y a los consumidores, realizamos anualmente un foro de inversión finanzas personales, este año será el 27 de septiembre y la participación es gratuita. Se tratan temas de actualidad y novedades relacionadas con la educación financiera y las inversiones y los mercados financieros. Este año se celebra la III edición ya tenemos a disposición de los interesados en la dirección www.aepfinancieros.org la información sobre el programa, los ponentes, eventos, etc.
Para los profesionales que se dedican a la planificación financiera personal tenemos a su disposición una serie de servicios relacionados con sus necesidades organizativas, marketing y branding personal, protección de datos, herramientas de gestión, etc.