Entrevista a Mari Luz Pérez, directora territorial en Lugo de Grupo Isonor
Divisar las posibilidades de mejora e identificar las líneas estratégicas de actuación resultan tareas complejas, ¿cómo se detectó en Grupo Isonor la necesidad e importancia de abordar una redefinición de las herramientas de gestión?
Grupo Isonor ha ido creciendo a una velocidad de vértigo. Los profesionales que forman este Grupo y la confianza de nuestros clientes que apuestan por nosotros como consultora especializada en prevención de riesgos laborales, protección de datos, calidad y medioambiente, en el diseño de su página web, el registro de marca o la tramitación de subvenciones, entre otras, han sido determinantes en la evolución de la compañía, al pasar de una empresa de ámbito local, a tener presencia en todas las provincias gallegas y, posteriormente, a posicionarse estratégicamente en el resto de territorios de España. Este crecimiento hace necesario replantearse la gestión de la empresa y, por tanto, las herramientas informáticas usadas.
La descentralización de los servicios administrativos y la mejora de la atención al cliente son los retos a superar, haciendo hincapié en una relación más personal y cercana. Conseguir integrar en un mismo programa informático todos los apartados de la consultoría y facilitar al cliente un único acceso a todos sus documentos es el alma de ISOGES. Con estos objetivos, las líneas de actuación estaban claras, teníamos que hacer una herramienta fácil, que permitiera disminuir los tiempos administrativos para poder dedicar más tiempo al trabajo técnico. El acceso a la herramienta debía ser total y permitir que se pudiese acceder desde un ordenador, una Tablet o un teléfono móvil. Cada vez más, la tecnología está en nuestra mano y no podemos ni queremos depender de un lugar físico para poder tener controlada la gestión de la empresa.
Una vez iniciado el proceso de transformación, ¿cuáles son las fases que las organizaciones deben abordar y los puntos críticos en los que es preciso hacer mayor esfuerzo para lograr los objetivos?
El primer paso para iniciar un proceso de transformación es tener el apoyo de la dirección y el compromiso de los miembros que integren el grupo de trabajo, por ello el punto crítico donde se tiene que hacer un mayor esfuerzo es definir bien el equipo que lo conforma. Los integrantes deben de estar convencidos de las necesidades de cambio y ser perfiles con iniciativa, ganas de mejora y capacidad de trabajo en equipo. Otro de los pasos sería organizar los trabajos, definir tiempos y establecer prioridades. Aunque esto parezca fácil, el orden de las tareas, detectando cuáles son las más urgentes y cuáles son objeto de mejoras, es básico para poder tener éxito y cumplir con los objetivos preestablecidos.